Klimt
Lisboa 2010
Me niego a vivir en el mundo ordinario como una mujer ordinaria. A establecer relaciones ordinarias. Necesito el éxtasis. Soy una neurótica, en el sentido de que vivo en mi mundo. No me adaptaré al mundo. Me adaptaré a mí misma.
Anaïs Nin
Anaïs la bella.
ResponderEliminarEl único personaje al que quisiera imitar. No sólo en escritura. También en vida.
Era sin duda una mujer fascinante.
ResponderEliminar¡qué sabio eso de adaptarse a uno mismo!
ResponderEliminarno esperaba menos....
ResponderEliminaradaptarse a uno mismo siempre es lo más difícil, pero también lo más satisfactorio ;)
ResponderEliminarY Anaïs, con su dulce nombre y con su vértigo.
ResponderEliminarQué bueno el poema de ahí abajo, en el que comunica...
Un abrazo!
Y su caos que nos acoge como hijos pródigos de sus palabras.
ResponderEliminarGracias, Lara.
Abrazos!